Cuidar la salud mental de los aparatos eléctricos
Los seres humanos no estamos solos en nuestro afán por los últimos dispositivos electrónicos. Las personas de todo el mundo llevan consigo sus dispositivos electrónicos de comunicación y música, literalmente en todas partes. ¡Es curioso que estemos tan acostumbrados a mantenernos en contacto las 24 horas del día, los 7 días de la semana, que muchos de nosotros incluso los tomemos de vacaciones! ¿Cómo es posible relajarse en esa hermosa playa, con cenas, campanas y timbres cada diez minutos? Esto huele a un nuevo estilo de comportamiento adictivo .
Recientemente hablé con una mujer que dijo que, antes de ir a trabajar, nada a una piscina comunitaria para hacer ejercicio a diario. Ella trae su teléfono celular y blackberry, ¡por si acaso! “¡No puedo soportar estar fuera de contacto! ¡Es importante que siempre esté accesible! ”Para proteger su artefacto del agua clorada, antes de sumergirse en la piscina, los desliza en bolsas de plástico con cremallera.
No queriendo ser contencioso, no dije nada. En silencio, me pregunté qué pasaría si un niño pasara corriendo. Dos imágenes aparecieron. Uno fue un crujido cuando el pie del niño aterrizó directamente sobre el instrumento. El otro hizo que el niño se resbalara, empujando el dispositivo hacia la piscina.
Había dejado las bolsas a unas cuatro pulgadas del borde de la piscina. Me preguntaba cómo escucharía sus artilugios gritar para ser notada. ¿Alguien podría robarlos? El aspecto de comportamiento adictivo me llamó la atención de inmediato, porque ella no los dejó encerrados en su automóvil. Como eran inútiles mientras nadaba en sus vueltas, esto significaba que quería tener acceso en el momento en que salía de la piscina.
Claro, hay algunas personas que, debido a la naturaleza o importancia de su trabajo, deben estar disponibles. Sin embargo, ese adolescente de allí, caminando entre clases, enviando mensajes de texto mientras va, probablemente no sea uno de ellos.
El comportamiento adictivo con dispositivos electrónicos está tan extendido que algunos estados han legislado el uso de, por ejemplo, teléfonos celulares. Mucha gente hablaba por teléfono celular mientras conducían por las autopistas, hubo un aumento notable en los accidentes de tránsito.
Un experto compara la adicción a los dispositivos con la adicción al alcohol, señalando que así como el alcohólico no puede moderar su uso, el adicto a los dispositivos tiene la misma mentalidad.
Si no puede ir a ningún lado sin sus amigos electrónicos, comprenda que este es un comportamiento adictivo. Debes tomar medidas para controlar tu obsesión. Aquí hay algunas sugerencias para ayudarlo a manejar el problema.
Si es sábado y vas al gimnasio para tu entrenamiento semanal, deja tus aparatos electrónicos en casa. Si necesita hacer una llamada, hay cabinas telefónicas, ¿las recuerda? El viernes por la noche, su semana laboral ha terminado. Todo está envuelto y sabes que tu jefe no te va a llamar a las 10 p.m. por un problema laboral. Retire la batería de su amigo electrónico y péguelo en un cajón.
Otra firma del comportamiento adictivo electrónico es la chica que revisa cada 30 segundos para ver si se ha perdido algo. Al igual que con el fumador que intenta dejar de fumar, abandónese lentamente de este hábito. Verifique cada quince minutos. Vea si puede llegar a media hora.
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